Cómo
todos sabemos el pasado 26 de Febrero de 2017 a las 17:30 hrs se dio inicio a
la 89ª entrega de los premios Óscar. Pudimos presenciar un acontecimiento jamás
visto en la historia de los premios: El presentador equivocó el nombre de la
película ganadora, arrebatándole el éxito a “La la land” para otorgárselo
posteriormente a “Moonlight”, ganadora a mejor película.
Lo
que ocurrió esa noche se trata de un error serio, histórico, algo que jamás se
pensó que podría ocurrir desde el error más reciente en Miss Universo. Warren
Beatty, presentador, se justificó diciendo que el sobre que contenía el
resultado decía “Emma Stone”, nombre de la actriz principal de “La la land”;
otras fuentes informan que Beatty se equivocó por un error técnico en el monitor
que aparece frente a la cámara. Sea cual sea haya sido la causa del error, fue
uno muy garrafal y poco profesional para una entrega de tal magnitud.
Considero
que ambas películas son buenas en su estilo, sin embargo, el mérito de La la land, corresponde en mayor parte a
la forma no al contendido. Se trata de una película bien hecha, con una alta
producción en vestuario, sonido, música y ambientación, de calidad. Sin
embargo, la trama corresponde al típico cliché
romántico estadounidense; los
personajes persiguen una historia de amor envuelta en flores y colores, buscan
ser parte del sueño americano y siguen las normas, sueños e ilusiones de tal. No
se trata de personajes complejos con problemáticas complejas, ni de un guion
demasiado elaborado.
Del
otro lado de la pantalla está Moonlight, con
una trama de índole social que pone su foco de atención en las problemáticas de
un estrato social que por mucho tiempo ha sido el lado oprimido, acallado y
relegado de una sociedad dominada por blancos y burgueses. Estamos hablando de
un filme con una temática más cruda y realista, tal como es la vida, sin
filtros. La historia de un niño afroamericano que vive, siente y lucha en la
violencia.
Hollywood
es una empresa dominada por grandes consorcios corporativos y por magnates
millonarios; produce en su mayor parte cine comercial, un cine “fácil y
diferible”, un cine que representa a la sociedad americana, consumista y
capitalista, dónde la cultura del fast
food no solamente impera en la comida, si no, también en su estilo de vida:
fast life, fast money y fast movies. El
cine Hollywoodense es un fiel retrato de una sociedad de consumo donde las
cosas se fabrican para desecharse y posteriormente volverse a consumir; dónde
las cosas deben ser rápidas, de ahí su tan representativo cine de acción, lleno
de movimiento, luces y sonido.
Sin
embargo, en menor cantidad, Hollywood ha logrado producir también un cine más
completo y significativo, dónde la forma ha buscado colarse a rincones más
verdaderos de la naturaleza humana, como lo es la violencia racial, la desigualdad
y la marginación social. Temas de este tipo los podemos ver reflejados en
películas que han sido representativas para el cine Hollywoodense de este año,
cómo: Moonlight y Hidden Figures, o galardonadas con premios al Óscar de años
anteriores, cómo: 12 Years a slave y The Help.
¿Es posible pensar que en Hollywood exista un
favoritismo por el cine de “los blancos”? o por otra parte, ¿De qué manera
influye la situación política y social de Estados Unidos en dicho evento?
Analizando
desde el punto de vista social, me parece que la decisión de la academia de
galardonar con mejor película a una que está dirigida, escrita, adaptada, y protagonizada
por gente de color, responde en parte a la protesta social a la que se han
sumado muchos actores y directivos de la academia, en contra de las posturas
racistas y xenofóbicas del nuevo presidente de los Estados Unidos, Donald
Trump.
Me
alegra que haya ganado Moonlight a
mejor película, su lugar lo tiene bien
merecido.
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